Seas hombre o mujer, seguro que las flores fueron un elemento fundamental el día de tu boda: ramos de rosas, pétalos adornando el banquete, flores en las ventanillas del coche nupcial… Todo vale para un evento tan extraordinario como la celebración del matrimonio. ¿Pero recuerdas los preparativos del mismo? ¿La tediosa elección de los colores de la flor? ¿La intervención de expertos floristas en el decorado de la iglesia y el convite? De todo ello vamos a hablar brevemente, intentando rememorar, con un poco de nostalgia, las flores de tu boda.

El ramo de flores de la novia

Posiblemente, las novias recuerden con especial añoranza el obsequioso ramo de flores con el que se agasajaba su fidelidad. Un objeto de sumo valor, donde cada detalle guarda una representación simbólica.

Indudablemente, el ramo de la novia es la ofrenda floral más importante de una boda. Las flores seleccionadas atesoran un significado de lo más variado: rosas rojas como alegoría de pasión, amor y respeto; margaritas blancas como alegato de inocencia, infancia y amistad; amapolas como señal de sueños y esperanza; camelias como la encarnación del romanticismo más perfecto. Si aún te acuerdas del color y de las flores que componían el ramo, todavía hoy podrás comprender su significado inmortal.

Aunque es muy común arrojar el ramo a las damas solteras que acuden a la ceremonia, algunas esposas optan por preservar las flores para siempre. Una forma válida de perpetuar una evocación tan hermosa como ésta. También es habitual regalar un ramo de flores a la novia los días antes de la boda.

La complejidad de combinar

Los novios no habrán olvidado la frustración de tener que esperar a conocer el vestido de la novia antes de encargar el ramo de flores. Y es que éste debe combinar armoniosamente con el traje femenino, unificando el busto de la futura esposa con la cantidad, forma y color de los pétalos.

Lo mismo se aplica a las flores colocadas en el ojal del novio y los padrinos. Algo que se puede solventar fácilmente utilizando flores como lirios u orquídeas, muy apropiadas para estos casos. Los invitados más cercanos a la familia recordarán este recatado adorno con cierta confusión, aunque por suerte, las fotos del enlace matrimonial podrán arrojar algo de luz sobre dicho ornato.

La decoración de iglesias y banquetes

Fuese un templo religioso, un centro civil o un ayuntamiento, seguramente solicitaste permiso para engalanar el lugar de la ceremonia con una serie de motivos florales. El uso de coronas de flores y pétalos de rosa esparcidos por el suelo es algo muy común. ¿Pero utilizaste algún adorno especialmente cautivador? ¿Te acuerdas de él? Posiblemente sí, porque las flores tienen el poder de convertir una simple estancia en un jardín lleno de magia y encanto.

Mucho más variada y tediosa acostumbra a ser la decoración de los banquetes: mesas, sillas, pasillos… Todo debe relucir, homogeneizando elementos ornamentales y mezclando otros, siempre evitando el fuerte perfume de algunas flores. Probablemente, las flores que engalanan un banquete sean las menos recordadas por el matrimonio, porque por regla general, la pareja deja este aderezo en manos de profesionales. Aún así, siempre es conveniente marcar ciertas pautas en dicha ornamentación, para que la memoria del ágape guarde cierto sabor floral.

El presupuesto

Por último, es muy posible que las flores de la boda supusieran un ingente desembolso para el novio y la novia; y eso difícilmente se olvida. El ornato íntegro de unos esponsales puede alcanzar importes desorbitados, y el precio aún es mayor si las flores seleccionadas no son de temporada. Debido a eso, es normal emplear plantas de la época u adornos relacionados con el mes en el que se celebra el matrimonio. En las bodas acaecidas en otoño, no es nada raro ver alfombras engalanadas de hojas y flores secas, dando un punto original al evento.

Esperamos que los recuerdos de las flores de tu boda se hayan materializado con la lectura de este artículo. Claramente, cada casamiento es especial y único, y los adornos florales empleados en ella siempre reservan una profunda reminiscencia en el corazón de los amantes. Por ello, te invitamos a compartir con nosotros las remembranzas sobre las flores que dieron un toque esencial al día de tu boda.

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